jueves, 3 de noviembre de 2011

MALDITA INTUICIÓN



Everybody's Changing "Keane"

A todas las personas que dicen una cosa y hacen otra; a quién dice que nunca hace "x" y luego no hace otra cosa; a aquéllas mujeres que van de "yo no me acuesto con un tío sólo por tener sexo" y luego casi suplican que les echen un polvo; a los hombres que dicen "no quiero compromisos" y se piensan que eso es una licencia para follar y dejar tirada; a todas las personas que critican a los demás, pero son incapaces de hacer autocrítica; a los hombres y/o mujeres, que dicen que hacen el amor, y acto seguido te invitan a un club de intercambio de parejas; a todas las personas que viven el sexo como lo que no es (algo clandestino, que se hace a escondidas) y lo convierten en algo sucio; a todas las personas que hacen que los demás acabemos ACOJONADOS de volver a confiar; a los que dicen "sólo somos amigos" y no dejan de follar y de comportarse como una pareja...en fin, a todos ellos: que os dén dos óstias y os despierten, a ver si os dejáis estar de tanta gilipollez.

A las personas, hombres y mujeres, que aún buscáis el camino de baldosas amarillas, mientras os decíis "pero, si estaba aquí mismo" con expresión perpleja; a los y las que aún os creéis las palabras de un desconocido; a los que siempre devolvéis la llamada y contestáis todos los mails; a todos los que no tenéis ni puta idea de qué queréis, pero no salpicáis con vuestra mierda confusa a todo el que se cruza en vuestro camino; a los que no pensáis con la punta del nabo; a las que no pensáis con el cerebro femenino marchito y requemado con mensajes subliminales de la América de los '50; a todos ellos (entre los que me incluyo) sería interesante despertar de una buena buena vez.

El otro día, mi hijo, de 4 años, sacó a colación la palabra "pareja" al preguntarle yo, si sabía qué era una pareja, me dijo "Alguien que te da la mano, y no te la suelta nunca" 
Hoy tres días después de las sabias, sencillas y profundas palabras de mi hijo, me siento cansada, harta de mi sexto sentido. Hay días, en los que cogería mi intuición y le daría una patada tan fuerte, que la pondría en órbita fuera del planeta.

En ocasiones, soy capaz de saber qué va a ocurrir. Qué me va a decir una persona, por dónde va a irse, y qué puerta va a usar. Antes de que ocurra nada en la superficie....y cuándo ocurre, me quedo con cara inexpresiva, mientras noto como en mi interiror crece la sensación, siempre familiar, de desashosiego, desconsuelo, hartura.

Es que ¿por qué sólo me sirve para una cosa? ¿Por qué no me chiva por dónde debo tirar, por dónde buscar al hombre que sepa verme más allá de mi apariencia? Joé...Y al próximo que me diga: "eso no se busca, aparece" le arranco la lengua :-)

Bueno, no es una entrada con un mensaje concreto, ni que verse sobre un tema especial. Sólo son pensamientos que han salido, porque estoy bastante baja de moral. Aburrida de buscar...lo malo de embarcarse durante un año, buscando un tesoro, es que a fuerza de golpes (bajos también) aprendes a distinguir la bisutería y las falsificaciones, antes de verlas. Las hueles antes de que den el primer paso. Y eso, por lo menos a mi, me ha colocado en una actitud homófoba, y mis palabras, llevadas por la irritación delante de "perlas" que te quieren vender la moto, pueden ser muy duras...o sarcásticas.Y claro, se asustan los pobrecillos.

Para acabar con un buen sabor de boca (porque ahora mismo, estoy agria, agria...) diré que estas últimas semanas he recibido muchas visitas de Améríca Latina, así que saludo especialmente al visitante de Venezuela, Uruguay, México, Bolívia, Rep. Dominicana, Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, Perú...